Bodegas

Enmarcada en el corazón de La Rioja Alta, la bodega es atravesada por el Camino de Santiago, vía de conocimientos y culturas que los ha impregnado de un saber hacer vitivinícola clásico, que junto a los cuidados de sus reconocidos profesionales con gran experiencia elaboran vinos que no dejan a nadie indiferente.

Bodegas As Laxas tiene una larga y rica tradición que se remonta al año 1862, a través de las sucesivas generaciones que con mimo han cuidado este legado, se ha consolidado en el tiempo con la introducción de las más modernas técnicas de elaboración. Situada en la parroquia de Arbo y a orillas del "Padre Miño" sus antecesores ya elaboraban sus vinos en la finca As Laxas a finales del siglo XIX. Una tradición vinícola en armonía con el paisaje que rodea a estas tierras, ricas en tradiciones, costumbres y sabores.

Jose Antonio Arévalo y Benicio Garcia fundaron su bodega con la unión de sus dos familias “Garcia y Arévalo” en 1991, con la intención de elaborar vinos de las uvas procedentes de los viñedos centenarios situados en el municipio de Matapozuelos, famoso por producir unas de la mejores uvas de la variedad verdejo. Su filosofía es crear vinos que reflejen sus orígenes, la tierra, el clima, combinados con las tradiciones vitivinícolas y las nuevas técnicas y tecnologías.

En Pagos del Camino confían en la viticultura tradicional, natural y respetuosa con el medio ambiente. Una filosofía de bodega que marca la diferencia y hace de sus vinos un referente de calidad. Vendimia seleccionada en mesa, con maceraciones prefermentativas en depósitos con 3 remontados diarios. Trasiegos por gravedad. 

Bodegas Murviedro se fundó en Suiza, con el nombre Bodegas Schenk, tierra de grandes vinos, en 1893, de la mano de Arnold Schenk que heredó de su padre la pasión por el vino y la tierra y no tardó en convertir su firma en una de las compañías vitivinícolas más importantes a escala europea. A día de hoy, más de 125 años después, la empresa sigue siendo propiedad de la misma familia y mantiene los valores tradicionales sin perder la esencia de una empresa familiar, aunque gestionada por profesionales.

Cada una de sus uvas entra a 6 grados de temperatura en la bodega gracias a que el transporte se hace en camiones frigoríficos desde las viñas. No cualquier uva vale para elaborar sus vinos, son muy estrictos en este punto del proceso. Por ello, una vez en la bodega, someten las uvas a una doble mesa de selección.